The right to the city – David Harvey

Así, de manera indirecta y sin una conciencia clara de la naturaleza de su tarea, al hacer la ciudad, el hombre se ha rehecho a sí mismo.

El derecho a la ciudad es el derecho a transformar la ciudad conforme nuestras necesidades y sueños mas significantes, reinventarnos en periodos mas o menos variables, ya que uno debe considerar las variables sistemicas que intervienen en la dinámica social que tienden a ser contingentes, así dentro de tal contexto de inestabilidad continua no suele ser tan extraño en pensar en la necesidad de mayor certidumbre, es una visión prospectiva de amplio espectro que tiene que ver con la misma causalidad de la predicción de escenarios deseables para la mayoría de los ciudadanos, y es simple tener en cuenta que lo deseable es aquello que tiene que ver con las ideas de la corriente humanista de las ciencias sociales, se refiere a valores profundos de humanidad, entendida como la reciprocidad de especie que es la misma conservación.

se refiere a la igualdad, la libertad o la justicia, conceptos que son los caballos de batalla de cualquier movilización social, lo deseable es también el deseo de un futuro mejor un futuro que no sea tan cambiante como el que existe en este momento, se trata de ampliar el grado de certidumbre donde el espacio público sea el tipo ideal de convivencia, donde la supervivencia sea una variable controlable, así que reinventar a la ciudad significa de cierta forma la transformación de nosotros mismos.